Estrés oxidativo
Los radicales Libres (RL) cumplen una importante función en los diferentes procesos homeostáticos esenciales para la vida. Como la destrucción de microrganismos por fagocitosis, síntesis de mediadores inflamatorios, entre otros. Las concentraciones bajas de RL son beneficiosas; sin embargo; en cantidades excesivas son toxicas ya que al oxidar moléculas biológicas las alteran y desencadenan trastornos en el metabolismo celular.
Los organismos aeróbicos poseen un sistema antioxidante (AO) protector que limita la acción nociva de los RL. La función de los AO es, no solo evitar la formación de RL, si no también, la de reparar o remover los daños causados por los RL.
- La generación de RL y la capacidad antioxidante de un organismo se encuentra en equilibrio; al romperse ese equilibrio se crea una situación llamada “estrés oxidativo”, que puede producir daño celular, desencadenar trastornos fisiológicos y favorecer la presentación de procesos patológicos.
Muchos de estos Antioxidantes son enzimas o están formados en su estructura por nutrientes esenciales incorporados al organismo a través de las dietas. A estos de los divide en AO “no enzimáticos” como por ejemplo: Vitamina C, Glutatión, Ácido Úrico, Ergotioneina. AO “enzimáticos”: Catalasa, glutatión peroxidasa. Y también Algunos minerales están ligados a la protección contra el daño oxidativo. Algunos de ellos son el Zn, Se, Mn, Fe, Cu.
La presentación del daño oxidativo puede atribuirse a una deficiencia de sustancias protectoras. Quedando establecida la estrecha relación entre el estrés oxidativo y el estatus nutricional. Por lo tanto, una ingesta inadecuada de determinados nutrientes deprime la acción de algunas enzimas AO. Otros factores como enfermedades, estrés o la inducción de la respuesta inmune llevan a un incremento en los requerimientos de vitaminas y minerales, la mayoría de ellos involucrados en la defensa AO.
Diversos procesos patológicos, están fuertemente vinculados al estrés oxidativo y los procesos inflamatorios:
-Enfermedad del corazón de Mora.
-Síndrome del intestino permeable.
-Neumonías.
-Síndrome de MMA.
-Menor rendimiento de la canal.
-Retraso en el crecimiento.
-Reducción de la fertilidad.
-Menor tamaño de la camada, menor peso al nacimiento.
¿Cómo reducimos el estrés oxidativo en nuestros animales?
Uno de los principales factores desencadenantes del estrés oxidativo como vimos está relacionado con la alimentación. Por lo tanto, proporcionar dietas y fuentes proteicas de alta calidad, bajo en factores anti nutricionales, dietas libres de micotoxinas y grasas oxidadas reducirán la inflamación intestinal y por ende el estrés oxidativo.
Reducir los factores de estrés ambiental y social también será importante. Incluida la densidad de alimentación, peleas, higiene de las instalaciones, acumulación de gases nocivos, estrés por calor/ frio.
También debemos remarcar que los altos estándares de producción llevan a incrementar naturalmente el estrés con lo que viven los animales. En el caso de las cerdas durante el último tercio de la gestación y en la lactación cursan un estrés oxidativo inducido por una carga metabólica severa afectando el rendimiento reproductivo y en la lactancia.
Actualmente se promueve el uso de estrategias nutricionales que estimulen el metabolismo y que tengan efectos antioxidantes, antitóxicos y antiinflamatorios. Aditivos a base de Cardo mariano, Cúrcuma y Betaina tienen una alta capacidad antioxidante.
- Independientemente, de la forma elegida, la reducción del estrés oxidativo nos conducirá a tener animales más sanos y con mayor rendimiento. El sistema inmune estará menos desafiado por lo que habrá más proteínas y energía disponibles para promocionar el crecimiento de los animales.
M.V Tamara Pinamonti
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